Adhesión al Día de la No Violencia de Género

El municipio de Bella Vista adhirió al Día Contra la Violencia de Género este 25 de noviembre conmemorando la fecha de un movimiento iniciado en 1981 en Latinoamérica y acuñado en honor a Minerva, Patria y María Teresa Mirabal, tres hermanas dominicanas asesinadas el 25 de noviembre de 1960.

Este 25 de noviembre el gobierno local instaló un banco de madera en la plaza Pedro Ferré como símbolo universal de la lucha contra la violencia de género, que se utiliza en campañas a lo largo y ancho del país. Al respecto el secretario de Desarrollo Humano Nicolás Scófano, explicó el porqué de la importancia de este símbolo.

“Porqué la importancia de este símbolo?” se preguntó el funcionario y al respecto señaló “porque necesitamos visibilizar no solamente la problemática sino el rol que como Estado y sociedad tenemos frente a la misma. Debemos llegar a cada vivienda de la localidad.

Cada mujer o cada víctima debe conocer las herramientas que como Estado tenemos para brindar, para acompañar. Sabemos que es una decisión difícil, pero más difícil es despertar en las mañanas y leer en las noticias un nuevo caso de maltrato o de violencia, o aún peor un nuevo femicidio”.

Desarrollo Humano lleva adelante un sostenido trabajo mediante el equipo del Área de la Mujer y la Familia. En la ciudad ocurrieron 3 femicidios e innumerables denuncias e intervenciones sobre violencia “Lo que no queremos es repetir esto, debemos frenar ponerle un alto. El peor enemigo es el silencio; el de un pueblo que mira de reojo”, manifestó Scófano.

Así mismo, varios integrantes del Departamento Ejecutivo coincidieron en que “debemos dejar una huella, un sendero, para las próximas gestiones y generaciones. Debemos inmiscuirnos en problemas sociales como éstos, porque nos cuestan vidas, porque se llevan sueños…”, no obstante agradecer la presencia de otras autoridades y vecinos.

Las hermanas Mirabal perdieron la vida por órdenes del dictador Rafael Leónidas Trujillo, de quien eran opositoras. Los cuerpos de las tres fueron hallados en un carro hundido en un barranco, en Salcedo, República Dominicana.