Alegría por las Fiestas Patronales de Bella Vista

La comunidad bellavistense rindió homenaje a la Virgen del Carmen como patrona de la ciudad durante diferentes actos organizados por la entidad parroquial de su mismo nombre. El clima ameno durante toda la jornada propició la presencia de miles de devotos concluyendo el programa con la misa concelebrada frente al remozado templo dela Madre.

Un día espléndido acompañó las festividades patronales de la Virgen del Carmen de Bella Vista cumpliendo con comodidad desde muy temprano el programa litúrgico y a media mañana la Caravana compartida con las comunidades de San José Obrero y María Auxiliadora. Las honras se vivieron en un marco especial de alegría en virtud de las destacadas obras de refacción y restauración del templo parroquial.

Si bien en la víspera se llevó a cabo la tradicional Cantata a la Virgen y el saludo en la medianoche para dar la bienvenida al día patronal, la mayor concentración se produjo en horas de la tarde durante la Solemne Procesión que dio lugar a la celebración presidida ´por el párroco Osvaldo Raimondo.

En la homilía a cargo del Padre Gregorio Valenzuela –titular de María Auxiliadora- éste recordó “la situación de nuestro Pastor que atraviesa un momento de dificultad; rezamos por él”, dijo en referencia a monseñor Andrés Stanovnik quien será operado el próximo lunes 22 del corriente.

“Goyo” invitó a la feligresía a imitar a María “porque ella tuvo la virtud de nuca cansarse de luchar y mantener aquella pequeña familia. Porqué fue incansable cuando tuvo que acompañar a su hijo que sufrió, que se caía y se levantaba pero llegó hasta el final. Y finalmente frente a la cruz María asumió que había entre ellos un pedido recíproco de seguir juntos por siempre.

Y hoy es una obra de María que ustedes puedan acudir a ella como Madre. Ella como ejemplo fiel de la fe de Dios. A partir de la experiencia del dolor al pie la de la cruz comprendió cuál era su legado; nunca te canses como madre ó como padre.

No se cansen de hacer el bien. No te canses de luchar por tu familia. Que nunca haya razón para abandonar a tus hijos, a tus padres. Nunca te alejes de Dios. Porque el dolor es una de la razón para aferrarnos a Dios.

Ustedes padres nunca dejen de velar por sus hijos. No solo preocúpense sino ocúpense del dolor de sus hijos. Entiendan en el dolor de sus hijos y ustedes chicos también vean el dolor de sus padres para encontrar el camino. Todos sus esfuerzos serán el testimonio de nuestra fe.

Mirémosla a María y pidámosle no cansarnos jamás en nuestra misericordia. Que así sea”.

En la despedida Raimondo agradeció las obras de refacción del templo impulsadas por el Gobierno de Corrientes, recordó al Padre Ricardo Margaritti –histórico celebrante de las novenas actualmente impedido de asistir-, a los sacerdotes presentes y en especial al Padre Valenzuela.